Muy buenas noches y gracias por venir.

El concepto planteado en este libro no es más que un intento por rescatar la cultura de nuestro país.
Esa cultura que en un pasado, que ahora llamamos glorioso, nos llevó a lo que hoy somos como nación, pero que lastimosamente estamos perdiendo.

Por ello, uní dos simples elementos en aras de recuperar parte de la cultura panameña: la filatelia como testigo impreso a través de los sellos, de acontecimientos del pasado de nuestra historia y de nuestras vivencias; y la literatura, presentada por autores de una altísima excelencia y que plasmaron en sus artículos un análisis sosegado de acontecimientos históricos que sólo el tiempo y la distancia nos permite ver con mayor claridad en este Siglo XXI.
Los escritores de este libro somos literatos que nos encontramos en una lucha contra el olvido de la cultura, pues estamos convencidos que por medio de ella recordamos nuestros rasgos distintivos, espirituales, materiales, intelectuales y afectivos que han caracterizado a nuestra sociedad y que abarca, además de las artes y las letras, los modos de vida, las maneras de vivir juntos, los sistemas de valores, las tradiciones y las creencias.
Y si ello no fuera así, los detractores de la democracia y la justicia no censurarían las plumas de aquellos que denuncian atrocidades contra de derechos fundamentales; no tratarían de acallar a las personas que con solo la mejor arma del hombre, la inteligencia, pelean batallas a través de la tinta y el papel para que otros no olviden.
La historia está plagada de villanos que cuando se hacen del poder queman bibliotecas enteras con un solo fin en mente, borrar las memorias de los ciudadanos, en nombre de revoluciones que más que unir separan y que nunca triunfan.
Ahora a la mitad de la segunda década del Siglo XXI, los enemigos de la literatura y por ende de la cultura y nuestras raíces como nación, se presentan de manera solapada a través de tecnologías que nos aísla, nos controla y en el nombre de la globalización, nos separa y nos lleva a la nada del ciberespacio, aniquilando las identidades de nosotros como ciudadanos de un país y llevándonos a convertirnos en ciudadanos robotizados.
El ser humano nunca antes había estado más comunicado que ahora, pero al mismo tiempo nunca había estado tan sólo como ahora.
Es indispensable en esta época volver a integrar las emociones entre las personas, pero a través de un contacto personal y no virtual.
Para los escritores de este libro el único fin ha sido sembrar una huella que busca despertar ánimos que luchen contra el olvido y la soledad y para que retomemos la identidad cultural de Panamá como nación.
Los escritores que me han acompañado en esta misión son:
Vicente Pascual
Miriam de Bern
Maria Mercedes de la Guardia de Corró (Chelle)
Julio Linares
Jaime Adames
Alfredo Figueroa Navarro
Arístides Royo
Daniel Alonso
Ebrahim Asvat
Franklin Briceño Salazar
Jorge Federico Lee
Sebastian Sucre
Rolando Domingo
Orlando Hernandez
Jorge Ventocilla

No puedo culminar sin darle las gracias a mi esposa cuyo apoyo a este proyecto fue incondicional y que gracias a sus continuas ideas pude llevar a feliz puerto este libro. Gracias Ani.
Y a todos ustedes muchas gracias.